Seguimos con la serie de viajes y chocolate. Y pasamos de lo más «chic» en el mundo del cacao a una tradición popular que se ha convertido en una fiesta del chocolate. El lunes de pascua en Cataluña es llamado el día de la mona.
La mona no es ningún animal, sinó que viene del árabe munna que significa obsequio y se trata de un pastel que antiguamente era de pan quemado con un huevo duro, y actualmente es un pastel de bizcocho con un gran huevo de chocolate, o en su defecto cualquier tipo de figura o escultura de chocolate. La tradición hace que las familias disfruten de este día en el campo.
Como se regalan a los ahijados es posible que se acumule más de una mona, cosa que os aseguro no es ningún problema. 😉
Monas de todo tipo con todo tipo de figuras, aunque generalmente los huevos son lo más típico.
La creatividad y las aficiones del pastelero se pueden apreciar en los diseños. Aunque no siempre podemos decir que el pastelero consigue una réplica exacta (supongo que ese día no estuvo muy acertado o el diseño lo hijo su hijo de 3 años).
Y después de tanto chocolate os confirmo que puede crear problemas en la vista. A la pregunta de si el chocolate en exceso puede provocar problemas de visibilidad, esta es la confirmación de que es posible 😉
- De todas formas, os aseguro que en el mundo del chocolate, el tamaño no es un problema. Es posible devorar grandes piezas rápidamente.
- Como veis, tengo la suerte de que una vez al año, hay un día que el chocolate es el protagonista.
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