Al puente de Carlos hay que llegar tranquilamente caminando entre las calles empedradas de Praga. Yo, llegué desde el barrio de Malá Strana hasta que me encontré con un pórtico custodiado por dos torres de diferente altura. Sin duda, estaba expectante ya que me encontraba en Praga a punto de entrar en uno de los puentes más famosos del mundo.
Torre de Judith
La más pequeña de las torres del barrio Malá Strana es la torre de Judith que debe su nombre al antiguo puente de madera y que a mediados del siglo XII se reconstruyó en piedra. Es de estilo románico con una altura de 29 metros y que posteriormente se recubrió con un tejado renacentista.
Torre de Mala Strana
Unido a la torre de Judith encontramos la Torre gótica de Mala Strana que data del siglo XV y llega hasta una altura de 49 metros. Se puede subir a esta torre desde donde se obtienen unas excelentes vistas de la ciudad vieja.
El ambiente de Praga
El puente de Carlos es uno de los atractivos principales de Praga. Por ello, a casi todas horas hay un gran ambiente de turistas y transeúntes. En las épocas del año que el clima lo permite es habitual encontrar puestos de pintura a los largo del recorrido intentando vender sus obras a los turistas.
Lo más habitual es encontrar mucha gente en cualquier época del año.
Las estatuas
A medida que avanzamos por el puente, comienza a aparecer el majestuoso castillo mientras que las 30 estatuas ubicadas en los 15 pilares del puente nos escoltan a lo largo de todo el recorrido.
Las estatuas fueron realizadas por los mejores escultores de la época: Matías Braun, Jan Brokof y los hijos de ambos que continuaron con el trabajo de los padres.
Las vistas de Praga
Mirando a un lado del puente podemos admirar el castillo…
El rio Moldava
Y hacía el otro lado tenemos una magnífica vista del rio Moldava a su paso por Praga.
En mi paseo encontré muchas gaviotas y alguna se dedicó a posar para mi cámara.
Otra foto con gaviotas y el castillo al fondo.
A medida que avanzamos nos acercamos al otro extremo del puente que da la bienvenida a la ciudad vieja.
Torre de la ciudad vieja
Comenzada por el emperador Carlos, fue terminada a comienzos del siglo XV por su sucesor Venceslao IV según un proyecto de Peter Parlér. Esta torre formaba parte de las fortificaciones de la ciudad y es una de las más bellas puertas góticas que quedan en Europa. Durante la ocupación sueca del 1648 se perdió toda la decoración de la parte occidental.
La torre más cerca…
Un lugar mágico
La piedra fundamental del puente fue colocada un 9 de Julio de 1357 a las 5:31. La hora no fue elegida al azar. La secuencia, presentada de la siguiente forma presenta una estructura capicúa: 1357 9(día) 7(Julio) 5:31, con el nueve en el centro de la secuencia. Otra leyenda dice que el puente ha sido capaz de aguantar del mismo modo tal y como se terminó en el siglo XV gracias a la utilización de la clara de huevo a la masa de la construcción.
Aunque el puente ofrece unas vistas increíbles de la ciudad creo que es la noche cuando adquiere un tono completamente diferente y misterioso.
Las estatuas en la penumbra lucen de forma diferente. Como en todas las ciudades, siempre hay un lugar para los candados.
Y el castillo, iluminado en la noche ofrece su imagen más espectacular.
El dibujo de Praga
Desde el primer momento sabía que acabaría dibujando el puente de Carlos. En un post anterior presentábamos los mejores puentes del mundo en el que evidentemente estaba este puente orgullo de todos los praguenses. Este es el dibujo que presentaba:
Lo hemos podido ver de día y de noche en este post aunque al amanecer es un momento también único para visitarlo. A esa hora podréis encontrar la tranquilidad necesaria para disfrutarlo o… dibujarlo.
Director de ingeniería que no habla de tecnología, practicante del
Tengo pendiente caminar por este puente alguna vez en la vida real y no sólo con mi imaginación… Gracias por acercármelo un poquito.
Un saludo.
Essa, seguro que pronto estarás pisando el puente al atardecer viendo caer el sol sobre Praga. Ya contarás…
Me ha encantado tu post y nos trae muy buenos recuerdos. Como nosotros no tenemos la suerte de pintar como tú, nos trajimos laminas de este maravilloso Puente de Carlos, y ahí están, enmarcadas en nuestro salón, para poderlo ver todos los días 😉
¡Enhorabuena por este fantástico blog, estupendo para familias viajeras!
Un saludo
Pilar
Gracias por el comentario. Me acabas de recordar que hace días que no publico algo para niños. Creo que la semana que viene hablaré de …