En un viaje con niños a Holanda (o sin ellos) no puede faltar una parada en la isla de Marken. Digamos que es un destino que cumple las expectativas tanto de una familia como de una pareja que puede disfrutar en la isla de la escapada romántica perfecta. Además, la califico de isla maravillosa ya que estar alojados en Marken unos días nos ha permitido descubrir uno de los rincones más idílicos que hemos conocido y que despertará en tí las ganas de conocerla. Y si a estas ganas le unimos una proximidad a Amsterdam creo que no habrá excusas para visitarla.
Es un pueblecito con casas como eran las de pescadores hace años.

Y casas sacadas de un cuento.

La proximidad al mar hace que los canales de agua formen parte del paisaje.

La mayoría de veces los únicos transeuntes de los canales eran los patos cuyos graznidos eran todo el sonido que se podía oir.

Realmente los canales entre el verde de los prados hacen que cualquier vista sea idílica.

Cada rincón, un lugar sacado de un cuadro.
Pero este paisaje idílico no es fruto de la casualidad. La comunidad tiene blindado el pueblo para protegerlo de elementos tan agresivos como la especulación inmobiliaria o la masificación. De esta forma, no es de extrañar que solo haya un hotel en la isla y la realización de un segundo o incluso el alquiler de casas sea un tema complicado para los propios residentes en la isla. Aunque sin duda estos impedimentos provocan un entorno idílico y que mantiene intactas muchas tradiciones. Un puente delimita la entrada al pueblo siendo imposible la circulación de coches en su interior. Hay un párking de pago a la entrada del pueblo donde se ha de dejar obligatoriamente el coche.

Algunas partes perduran las estrecheces de tiempo atrás.

El pueblo era una isla pero desde el año 1957 es una península al estar conectada por una carretera que facilita su acceso. Por suerte sigue conservando ese sabor a isla y por tanto, ambiente marinero.



Desde la edad media ha perdido un tercio de su tamaño. El antiguo claustro se encuentra sumergido al norte de la isla. Debe de ser curioso de visitar.
Volviendo a la visita he de confesar que a raíz de ver algunas fotos de la isla tuve claro que quería estar unos días viviendo con los nativos. Ellos, con sus trajes típicos holandeses parecen vivir ajenos al ritmo frenético de las grandes ciudades.
Me sorprendió esta tienda de zuecos. Lo curioso es que aparte de ser un souvenir también es el zapato que llevan muchos de los habitantes de la isla.


Allí, creo que el tiempo se pierde en otros temas. Por ejemplo el dedicado a tener jardines absolutamente perfectos.

o simplemente unas terrazas donde sea un placer estar sentado leyendo un libro.

En un viaje con niños a Holanda, este destino después de Amsterdam tal y como hicimos nosotros nos aportó el equilibrio necesario a las vacaciones. Después de la ciudad, un lugar donde descansar y correr por sus largos caminos fue una experiencia muy gratificante. Pau y David anduvieron muy cómodos por la isla.

María también.

Y por las tardes no podéis perdeos el atardecer en la orilla del mar. Un libro esperando que llegue la hora del espectáculo solar es una opción interesante. Eso sí, cuando se acerque el momento deja que todos tus sentidos estén pendientes del momento.


Y poco a poco la tarde cae en la pequeña isla de Marken.


En definitiva, he decidido que este post sea eminentemente fotográfico ya que creo que un lugar como Marken se explica a través de imágenes. Si quieres un lugar perfecto para la familia o una escapada romántica con tu pareja no puedo imaginar un lugar mejor. Además, estoy seguro que la isla os recibirá con los brazos abiertos.

En un próximo post os mostraré la casita de pescadores donde nos alojamos en la isla.
Una maravilla de post y de lugar. Tuve la suerte de visitarla hace un par de años con mis hijos (también le dediqué un post) y no me canso de ver sus fotos. Me hubiese quedado paseando allí toda una eternidad. Y el pase en ferry desde Volendan, una preciosidad. La postal de la llegada al puerto de Marken en ferry merece miles de fotos. Una joya. Gracias por recordármelo! El viaje a Ámsterdam y en general a Holanda, debería ser obligatorio para toda familia con peques 😉
Tienes razón. Creo que debería de ser obligatorio en familia. En un lugar tan tranquilo y con tanto prado y agua para jugar, es un lugar perfecto para ir con niños. Gracias por comentar!
Muy buena esta entrada
la verdad es que este tipo de lugares son los que nos dan motivos para seguir viajando
abrazos
Pues es un lugar a 20 minutos de amsterdam pero con un contraste brutal. Pasas de la gran ciudad al campo en un momento. Todo gracias a la protección de la comunidad del entorno y su preservación. La dueña del hotel quería ampliar con alguna otra casita pero me comentaba que le era muyyy complicado. Me alegro que sea así…
Es un sitio estupendo para perderte es precioso !!!!!!!! gracias por compartir estos sitios con tanto encanto un saludo.
Veo que las islas de Holanda molan… Nosotros estuvimos en Schiermonnikoog. También una maravilla sin coches 😉
no conocía esa isla. Gracias por la información 😉
Me encanto el blog, Holanda siempre a sido mi sueño , estoy empezando a viajar y ya llevo 5 países y es maravilloso conocer costumbres distintas espero pronto llegar a Holanda me guardo el blog , Saludos.
hermoso viaje para hacerlo en familia, me encanto!