Bélgica es fotogénica lapizgénica. En el recorrido que hice por Valonia en Bélgica hay infinidad de lugares donde pararse a dibujar. En este post, os daré dos perspectivas de mi visita a La Roche en el sur de Bélgica. Este enclave es característico por el castillo que lo corona así como estar situado en una zona donde hubo mucha actividad bélica en la segunda guerra mundial. Por tanto un punto de interés para el turismo bélico. Os ofrezco dos formas de visitar La Roche. La que ve mi lápiz y la que vieron mis ojos aquel día de un soleado Septiembre.
Visita dibujada
En la visita dibujada comenzaremos arriba. Si hemos de dibujar en La Roche, lo mas representativo es el castillo que corona la ciudad. Piedras y piedras acumuladas creando una estructura que ha resistido desde allá por el año 800. aunque, como muchas veces pasa, aguantó tantos siglos para que luego un bombardeo en la segunda guerra mundial le diera una estocada casi definitiva. Por suerte, aún se hace atractiva la visita ya sea por pasear entre sus muros como para disfrutar de las expléndidas vistas de la ciudad. Las ruinas actuales, con sus torres, troneras y mazmorras, conservan la huella de la época feudal.

Puedes pulsar en el dibujo para verlo ampliado.
Desde lo alto de la fortaleza, una de las vistas que más me llamó la atención fue la iglesia. Se eleva majestuosa encima de las pequeñas casas colindantes…

Pulsa en el dibujo para verlo ampliado.
Otro rasgo característico de esta ciudad son sus calles empedradas. Principalmente las que se encaraman al castillo. Subir por ellas es un duro ejercicio que tiene recompensa.

Visita fotográfica
Cambiando de perspectiva, vamos a ver como son esos lugares que han inspirado los dibujos. En esta localidad, en el año 1944 tuvo lugar un encarnizado combate entre las fuerzas aliadas y las alemanas. Hasta que fue liberada el 11 de Enero de 1945 gran parte de la ciudad quedó en ruinas y por tanto, tuvo que ser reconstruida. Quizás por todo ello, esta zona es considerada de turismo bélico. La imagen de este imponente tanque dándonos la bienvenida fue la primera foto que hice al llegar.

Además, existe un museo muy documentado basado en las batallas que se libraron por estas tierras para los amantes de este tipo de turismo.
A continuación nos dirigimos al castillo de La Roche. Aquí tenéis la serie de fotografías del mismo.






Disfrutar de las magníficas vistas del pueblo a nuestros pies fue uno de los mejores momentos del día.


Antes de despedirnos del Castillo, pudimos ver el fantasma y el caballero. Una curiosa leyenda cuenta la relación entre la doncella fantasma y este caballero. Pero, esto quizás sea para otro post…


Tuvimos la suerte de disfrutar de un espléndido día soleado. En ese tipo de días, cualquier detalle resalta, como las flores rojas que adornan el río …

Pasear por sus calles es disfrutar de la tranquilidad del lugar. Sus innumerables terrazas nos invitan a sentarnos a tomar una cerveza (de las casi infinitas opciones que hay). De repente aparecieron delante nuestro…


Como ya he dicho en alguna ocasión, esta zona de Bélgica parece estar construida de casas de juguete como la casa consistorial. Los playmobil de mi hijo tienes casas parecidas 😉

Era mediodía y el hambre apretaba. Os aseguro que me sorprendió la variedad de la gastronomía de esta región. Comimos en un restaurante llamado Maxime.







Finalizamos aquí la visita a La Roche con sus dos perspectivas. La dibujada y la real. Espero que os podáis hacer una idea lo más aproximada posible a esta encantadora ciudad Belga. Podéis encontrar este post así como la serie de Bélgica en este enlace al monográfico. También encontraréis todos los dibujos.
Conocía el lugar por la historia, pero no lo había visto… La combinación de las fotos y tus dibujos me dejan con ganas de pasar alguna vez por allí…
La verdad que es un recorrido interesante. Tranquilidad, historia y naturaleza…
¡Nos gustamos mucho de tus dibujos y fotos! Bélgica es una ciudad muy inspiradora.
Gracias por lo de los dibujos!!!
¡Vaya lujo aparecer en uno de tus dibujos! Mil gracias, artista 😀
En el fondo me alegra comprobar que unos pocos trazos de lápiz ha permitido que te reconocieras. Gracias por no reclamarme derechos de imagen… de momento 😉
Espero no ser el de los pantalones «cagaos»
no osaría a ensuciar tu imagen de modelo internacional ;D
Genial recorrido por la historia y la gastronomía. Además nos gustan mucho tus dibujos ¡Gracias por compartir y saludos!
Un placer que la oficina de turismo de Bélgica haga ese comentario. Para mi fue una experiencia inolvidable aquel viaje a Bélgica y creo que eso se ve en cada uno de los post que he realizado de aquel país. Espero volver algún día con mi família.
Un abrazo!