Cuando se viaja a la costa Este todo apunta a Nueva York. Sin embargo, quizás porque en Nueva York ya he estado unas cuantas veces y en Washington solo una, cada vez me gusta más. Los motivos son varios y el hecho que aglutine tal cantidad de museos ya es una buena razón de por sí. Realmente merecería mucho más tiempo del que podamos reservar pero algo es algo. Y esto es lo que dieron los 3 días y pico que estuvimos en familia en la capital de Estados Unidos.
Cómo llegar a Washington
Hay varias formas de llegar a Washington. Lo habitual es ir desde Nueva York en forma de escapada y aquí tenéis varias formas de llegar desde desde NY:
- Aerolíneas comerciales: Puedes tomar un vuelo desde el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy (JFK) o el Aeropuerto LaGuardia (LGA) en Nueva York hacia el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan (DCA) o el Aeropuerto Internacional de Washington Dulles (IAD) en Washington D.C. Suele haber buenas conexiones entre las dos ciudades.
- Tren: Amtrak: Amtrak ofrece servicios de tren de alta velocidad, como el Acela Express, que conecta Penn Station en Nueva York con la estación Union Station en Washington D.C. Es una opción cómoda y escénica para viajar. Nosotros utilizamos el Acela express y esta es una foto al salir desde Nueva York por la mañana.
- En autobús: Greyhound y Megabus: Varias compañías de autobuses, como Greyhound y Megabus, ofrecen servicios de autobús desde Nueva York hasta Washington D.C. Los viajes en autobús suelen ser asequibles, pero la duración puede ser más larga que en tren o avión.
- En automóvil: Si prefieres conducir, puedes tomar la carretera interestatal I-95 South desde Nueva York hasta Washington D.C. El tiempo de conducción varía según el tráfico, pero es una opción si deseas mayor flexibilidad y explorar lugares intermedios. Los que hacéis viajes de más tiempo esta es una opción recomendada ya que siempre ir parando, explorando, etc.. es de las formas de viajar que más suele gustar.
Como he dicho, las dos veces que he ido a Washington ha sido en tren desde Nueva York. Y creo que no vale la pena pensar en aviones u otros medios de transporte. El viaje no es largo y es muy cómodo en el tren Amtrak. Finaliza en Union Station, que es una estación interesante arquitectónicamente hablando y que data de principios del siglo pasado. Aquí una foto a nuestra llegada.
La Casa Blanca
La Casa Blanca, ubicada en el corazón de Washington D.C., es la residencia oficial y el epicentro del poder ejecutivo de los Estados Unidos. Este majestuoso edificio neoclásico es mucho más que una estructura arquitectónica; y como dirían los americanos, es un símbolo de la democracia y la historia del país. Los visitantes pueden explorar su rica historia y arquitectura a través de recorridos guiados. Desde sus columnas icónicas hasta sus jardines impecables, la Casa Blanca ofrece una visión de la presidencia y es un punto culminante para los amantes de la historia y los viajeros que desean conocer el corazón político de los Estados Unidos.
De todas formas, intenté hacer la visita guiada a La Casa Blanca y era muy complicado por varios factores. El primero, que se ha de solicitar la visita a la embajada y lo segundo es que estaba cerrado el servicio para extranjeros temporalmente (fui poco después de la pandemia).
La Casa Blanca es un edificio que no hemos visitado previamente pero ya lo conoces cuando llegas debido a la gran cantidad de películas en las que aparece. En definitiva que te resulta muy familiar… Si no tienes la suerte de conseguir el tour por La Casa Blanca siempre nos quedará como consuelo poder visitar la famosa valla donde los turistas se pasan el día haciéndose fotos.
Museo de la Casa Blanca
El Centro de Visitantes de la Casa Blanca es una experiencia recomendable si no podemos hacer la visita al emblemático edificio. Se encuentra en un amplio espacio y se puede considerar casi como un museo. Ofrece exhibiciones interactivas, un gran modelo de la Casa Blanca, galerías táctiles y una tienda de la Asociación Histórica de la Casa Blanca. Puedes explorarlo como parte de un recorrido por la Casa Blanca o de forma independiente, con 100 artículos en exhibición, como el escritorio de Franklin D. Roosevelt. Operado por el Servicio de Parques Nacionales, está en Baldrige Hall, dentro del edificio del Departamento de Comercio. Su diseño se enfoca en la accesibilidad. Se puede planificar tu visita en el sitio web del Servicio de Parques Nacionales aunque solo tienes que presentarte allí y entrar sin problemas.
National Mall
El National Mall es un impresionante espacio verde y cultural que abarca aproximadamente 3 kilómetros desde el Capitolio de los Estados Unidos hasta el Monumento a Lincoln. Este icónico espacio alberga algunos de los monumentos y museos más famosos del país.
A lo largo del National Mall, encontrarás monumentos como el Monumento a Washington, el Monumento a Lincoln y el Monumento a Jefferson, cada uno de ellos evocando momentos cruciales de la historia de Estados Unidos. Además, el extremo este del Mall alberga el Capitolio de los Estados Unidos, el epicentro de la política estadounidense.
También tenemos el Memorial de Veteranos de Vietnam que es un tributo a quienes sirvieron en la Guerra de Vietnam. Sus paredes de granito negro, con los nombres de los caídos, hacen de este sitio un lugar de reflexión y respeto hacia los veteranos. Es habitual ver americanos emocionarse al pasear por este lugar.
Por otra parte, los museos Smithsonian, que conforman la Institución Smithsonian, bordean el National Mall por lo que este paseo es la antesala a una de las mejores colecciones de museos del mundo.
El National Mall es también un lugar para eventos y celebraciones nacionales, como el famoso Desfile del Día de la Independencia y conciertos al aire libre. También nos recordará innumerables películas como Forrest Gump, etc.. Su belleza escénica y su importancia histórica hacen que sea un destino fijo para cualquier viajero que visite Washington D.C.
Para acabar, el Monumento a Martin Luther King Jr es un tributo a la lucha por los derechos civiles. Su imponente estatua de Martin Luther King Jr. y las citas inspiradoras grabadas en las paredes hacen de este monumento un lugar sobre todo de reflexión por lo que significó el personaje.
Capitolio
El Capitolio es también un destino esencial para cualquier viajero interesado en la historia y la política de Estados Unidos. Este edificio alberga el Congreso y es el epicentro de la democracia estadounidense. Nosotros exploramos sus impresionantes salas y pasillos, admiramos la cúpula y aprendimos sobre el proceso legislativo de la nación en el Centro de Visitantes del Capitolio. Además, los jardines circundantes y las vistas panorámicas del National Mall son espectaculares. Ya sea que estés interesado en la política o simplemente en busca de una experiencia cultural, el Capitolio ofrece una visita educativa y muy recomendables. Los cuatro (incluyendo mis hijos) disfrutamos de la visita.
Museos Smithsonian
Los Museos Smithsonian son un tesoro cultural imperdible. Con una colección asombrosa que abarca desde la historia natural hasta el arte contemporáneo, estos museos ofrecen una inmersión en el conocimiento y la creatividad. El Museo Nacional de Historia Americana te sumerge en la historia de Estados Unidos, mientras que el Museo Nacional de Historia Natural fascina con sus exhibiciones sobre la Tierra y la vida. Sin olvidarnos de mi favorito como es el museo del aire y del espacio (se nota que soy ingeniero). Y eso es solo el principio. ¡Lo mejor es que la mayoría son gratuitos! Por tanto, poder visitar estos museos de fama mundial ya es una excusa para escaparnos a Washington.
Biblioteca del congreso
La Biblioteca del Congreso es una joya cultural que merece una visita en tu itinerario de viaje. Como la biblioteca más grande del mundo, alberga una inmensa colección de libros, manuscritos y documentos históricos. Se pueden explorar sus majestuosas salas de lectura y admirar la arquitectura impresionante del edificio Thomas Jefferson. Además, el edificio John Adams presenta exposiciones fascinantes sobre la historia de Estados Unidos. Lástima que algunas salas de lectura estaban restringidas, especialmente las más fotogénicas que hemos visto en las películas.
Barrio de Georgetown
Georgetown, un encantador barrio histórico de Washington combina a la perfección la elegancia y la historia con un ambiente animado y moderno. Sus calles adoquinadas y edificios históricos crean una atmósfera pintoresca que lo convierte en un lugar ideal para explorar. Tenía muy claro que quería volver con mi familia a este barrio en el que estuve una semana estudiando en su universidad.
Uno de los destinos más recomendables es el C&O Canal, donde puedes dar un paseo relajante junto al agua y aprender sobre la historia del canal en el Centro de Visitantes.
Georgetown University es otra parada interesante, con su arquitectura impresionante y campus arbolado. Aquí me pasé una semana estudiante en esta universidad en un máster.
Las compras y la gastronomía son imprescindibles aquí. M Street y Wisconsin Avenue albergan boutiques de moda, tiendas exclusivas y una gran variedad de restaurantes. No hay que perderse una visita a la histórica tienda de cupcakes, Georgetown Cupcake.
Pasamos una mañana por el Waterfront Park que es un espacio tranquilo junto al río Potomac con vistas panorámicas y un lugar estupendo para relajarse. Finalmente, el barrio también es famoso por sus festivales y eventos culturales a lo largo del año.
Como podéis ver, Washington es una ciudad que ofrece no tantas cosas como Nueva York, pero de mucha calidad. Y no me canso de repetir que solo sus museos justifican el viaje. En breve repasaremos algunos de estos destinos con más calma en los post correspondientes.
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