Siempre hay dos caras. Una de ellas nos presenta el lado tradicional de las cosas. La otra esconde el rincón alternativo y que comulga menos con el gusto de todos. No escondo que muchas veces me gusta cruzar a este otro lado. Aquí, siempre hay sorpresas. Un buen ejemplo es el comercio. Ahora pongamos una ciudad: por ejemplo Londres. Allí, podemos ir a los grandes nombres como Harrods o irnos a lugares más excéntricos. He estado en ambos y me quedo con estos segundos. Simplemente, es más divertido. Por eso, esta vez en los dibujos viajeros he querido representar este lado más macarra de la ciudad. Esas tiendas con camisetas imposibles y artículos de los que no pondrías nunca en la estantería de tu casa. Delante de un par de esas tiendas, de camino a Notting Hill, esbocé unas líneas que acabaron en este dibujo. Lineas gruesas, marcadas e incluso incontroladas. Tanto, como la excentricidad de estos lugares mágicos.
Y ya puestos, para los que os guste el lado tradicional también tenemos trazos más limpios y menos arriesgados. Aquí otro de mis dibujos viajeros que con simples puntos que conforman una vista tradicional de Navidad en Londres: Harrods.
Elegid el lado que más os gusta…
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