Mi primer trabajo: botones de hotel. En la serie Yo, botones pongo sobre la mesa los recuerdos de mi primer contacto con el mundo del turismo.
A veces sin saber cómo intuyes como acabarán las cosas. Como ya os conté hace poco nada más entrar en el hotel me gastaron la primera inocentada.
Después tuve el «honor» de convivir cada día con el hijo del director. Este personaje era un tio de unos veintitantos que aparte de ser el típico «niño pijo que trabaja en la empresa del padre» -un día tendría que hablar de esto ya que conozco algún que otro caso- era el típico guaperas de verano.
Pero cual es el problema del guaperas de verano? que lo pregone constantemente…
-Ves, esa que pasa está disimulando seguro que ha venido para ver si estaba aquí.
-Oh, me han vuelto a traer un ramo de flores. Y es que son pesadas …
– Ves, esa que vuelve a pasar, no se atreve a mirar.
(coño, y pasó el verano y que no se atrevió nunca mirar)
-etc. etc. etc.
He de admitir que los primeros días me hacía gracia, pero al final se convirtió en una pesadilla diaria. Por eso mismo supe que debía vengarme de todos esos momentos de chulería veraniega insoportable. Y debía hacerlo por mí y en nombre, al menos, de la chica que pasaba y nunca miraba. Y os aseguro que mi venganza llegó, y tuvo lo que se merecía…
Hubo un muerto, un regalo y una venganza anunciada. La próxima semana en somosviajeros…
Essa dice
Por desgracia yo conozco a algunos también… Me quedo esperando cómo fue esa venganza tuya, 😉
Un saludo!
geminisdespechada dice
Un muertooo??? qué intriga.. y qué imbécil el tío..
andrés dice
por lo que veo estás expandiendo contenido, ahora hasta historias por capítulos jajaja
SOMOS dice
A veces recordando esta época, puedo asegurar que eso que dicen que la realidad supera la ficción es cierto…
Andrés… has visto que modernos nos hemos vuelto, crónicas por capítulos, … ya solo me falta algo para enviar SMS con la plabra botones, como en la tele …