En los viajes hay escenas surrealistas. En este video que grabé en Nueva York, hay que sumar otro surrealismo: el de algunas costumbres que adoptan los turistas como la de tocar los testículos al toro de Wall Street. Lo sé, absurdo, pero hay una cola con la gente cámara en mano para inmortalizar el momento. Y claro, iba con un compañero del máster que estaba haciendo en aquella época (Sergi) y no pudimos evitar grabar el momento en el que el que escribe tocó los famosos huevos. Esta es la escena y luego os comento porqué hay un toro plantado en medio de la calle en esta zona de Nueva York.
Pues este toro es propiedad de un artista (Arturo di Modica), que en el año 1989 se gastó más de 350.000 dólares en la escultura y la dejó delante del edificio de la bolsa.
Según él, era un regalo a los neoyorquinos aunque también podría ser considerado como una gamberrada artística; no fue fácil retirar el toro del lugar donde lo dejaron. En primera instancia, el gobierno de la ciudad lo retiró pero por la presión popular se reubicó en el Bowling Green. Ahora, el «charging bull» (toro a punto de embestir) está considerado una de las postales de la ciudad y los turistas se amontonan para tocar sus testículos. Según parece te traerá fortuna económica. Pero como podéis ver, las escenas son de lo más surrealistas.
Pero por fin le ha salido una digna competidora al toro. Una niña ha aparecido delante de él aunque la historia es algo enrevesada ya que en la aparición de la niña hay una campaña publicitaria detrás. Por otra parte, el artista original parece que no le ha sentado bien ya que ahora, el toro parece representar lo contrario a lo que el artista quiso transmitir. En este enlace he visto que explica un poco toda la historia del toro y la niña.
Hoteles 5 Estrellas dice
Impresionante este toro, buen vídeo!