No hace mucho conducía por la ciudad donde vivo en España y concretamente por una rotonda nueva que se había construido. Me sorprendió que en medio de la rotonda hubiera gente, puesto que no hay accesos a la misma. Quizás por ello me fijé con más atención. Había una familia china completa tumbados boca arriba y los niños jugando.
Es realmente triste en que están enfocando las administraciones sus políticas urbanísticas que hace que busquemos desesperadamente alguna zona con algo de verde y sin cemento. Esta familia china supuso que al ser de los pocos sítios del pueblo con césped debía de ser para uso público. Pues no, solo está para que quede bonito. Es la política, apariencia.
De todas formas, en Shanghai también tienen este problema. Os muestro estas fotos de una gran área verde con carteles de no pisar el césped. Evidentemente, la tentación es demasiado grande entre tanto rascacielos…
unjubilado dice
Yo tengo una casita en el Pirineo Aragonés y en cierta ocasión vinieron a plantarme unos árboles, el jardinero al ver el entonces precioso césped, me preguntó indeciso ¿se puede pisar? Yo le contesté que no solamente se podía pisar, se podía tumbar, jugar en él o lo que prefiriera ya que el césped esataba para disfrutarlo, no solamente para verlo.
Saludos
somos dice
Es lo que pasa cuando el verde escasea, es un preciado tesoro que tememos pisar. Afortunados los que los tienen cerca …
Elliott dice
Por suerte en México aun no tenemos ese padecimiento, pero como aun no lo perdemos no lo apreciamos, preferimos una larga calle de cemento a un camino panoramico.