El año pasado publicaba algunas fotos de como estaba cambiando la fisonomía de las ciudades en navidad. Se estaba produciendo una auténtica invasión de papa Noel …
Otro ejemplo era este:
Pero este año, cuando parecía que todo iba a ser igual, ellos han vuelto. Papa Noel no tiene nada que hacer ante estos tres macarras que se descuelgan por los balcones.
Y es que comienzo a tenerles miedo con esas caras que les han puesto. Procuraré no ir solo por la calle durante la noche.
¡Se acabó la Navidad! Gracias a Dios.
Ya está. Ya pasó todo.
Se acabaron los hipócritas deseos de paz y amor.
Balance: 100 muertos en las carreteras, 3 víctimas de la violencia doméstica, algún asesinato fruto del consumo excesivo de alcohol.
Se batieron los récords de reyertas familiares en Madrid la noche de Nochebuena.
Como siempre.
¡Feliz No navidad!
No digo que no esté de acuerdo en parte contigo. De todas formas, a veces es bueno, aunque solo sea por una noche, autoengañarnos, ser egoistas y pensar solo en nuestra familia.